Umbral




Intervención arquitectónica específica que busca dignificar y cuidar la vida de una familia que habita en condiciones de alta vulnerabilidad. En un espacio de 12 m² conviven cinco personas, por lo que el diseño propone soluciones espaciales de bajo costo, alta eficiencia y sensibilidad social. Para este proyecto se han desarrollado estrategias concretas para garantizar privacidad, orden, flexibilidad funcional y bienestar ambiental.
1. Privacidad y delimitación simbólica del espacio La privacidad es una necesidad psicológica fundamental para el desarrollo individual y la convivencia saludable. En el caso de UMBRAL, se propone la incorporación de nichos individuales tipo "nido" para los niños, construidos con paneles de OSB de 18 mm y estructura autoportante. Cada nicho cuenta con una cortina opaca que permite controlar visual y parcialmente el entorno inmediato, brindando un sentido de resguardo sin requerir sistemas rígidos de cierre. Estos espacios brindan la posibilidad de cambiarse de ropa, descansar y tener un refugio personal dentro del mismo cuarto, reduciendo situaciones de tensión y de vulnerabilidad.
2. Flexibilidad funcional y transformación espacial La multifuncionalidad del mobiliario permite maximizar el uso del espacio sin sacrificar calidad de vida. En UMBRAL se incorporan mesas plegables fijadas a muros, que se pueden usar para comer o estudiar, y se recogen cuando no están en uso. Se integran también módulos tipo cubo de 45x45 cm que sirven como asientos, mesas auxiliares o almacenaje, según la necesidad. Estas piezas pueden apilarse, reubicarse o esconderse bajo otros elementos, permitiendo reconfigurar el espacio durante el día y la noche.
3. Confort ambiental: luz, ventilación y control sensorial El diseño ambiental tiene un impacto directo en el bienestar psicoemocional. En UMBRAL se propone la ventilación cruzada mediante ventanas en muros opuestos, y el uso de textiles semitranslúcidos para permitir la entrada de luz sin comprometer la privacidad. Además, cada nicho incorpora una luminaria individual, reduciendo la dependencia de una única fuente de luz central y permitiendo que cada usuario controle su entorno.
4. Mediación de relaciones familiares a través del espacio El diseño puede actuar como mediador social. UMBRAL plantea la creación de un pequeño rincón común, delimitado con una alfombra y cojines, destinado a la lectura, el juego o la conversación. Este espacio tiene una función simbólica de encuentro y cuidado, promoviendo el fortalecimiento de vínculos afectivos y la resolución pacífica de conflictos en un entorno de alta carga emocional.
5. Orden y apropiación del espacio El desorden visual y la falta de espacios personales generan irritabilidad y sentimientos de invasión. En UMBRAL se han diseñado sistemas de almacenaje vertical, utilizando los módulos tipo cubo, estanterías abiertas y cajas identificadas por colores o nombres para cada miembro de la familia. Esto permite mantener el espacio despejado, asignar responsabilidades y fomentar la apropiación y el respeto mutuo.